Esta práctica médica para tratar la cardiopatía congénita se realiza a través de una punción en el vientre materno. Solo se lleva adelante en 15 países del mundo.
De Latinoamérica, además de Argentina, en el registro está Brasil, mientras el resto de los países son Estados Unidos, Países Bajos, Alemania, Suecia, Bélgica, Austria, Inglaterra, España, Francia, Portugal, Australia, Canadá y Polonia.
Según explica el Ifcir en su página, "la cardiopatía congénita representa uno de los tipos más comunes de anomalías congénitas y se presenta en aproximadamente 6 de cada 1000 bebés nacidos vivos".
Además, es la causa número uno de muerte infantil debido a defectos de nacimiento en la mayoría de los países occidentales.