REFORMA LABORAL: CONTRA LOS MONOTRIBUTISTAS, RESTRICCIÓN DEL DERECHO A HUELGA, VACACIONES EN VERANO CADA TRES AÑOS Y...

 

El proyecto que se tratará en las sesiones extraordinarias de diciembre también deja sin protección a los trabajadores de las aplicaciones.

La iniciativa repone buena parte del contenido que el Gobierno ya quiso implementar por la fuerza con el Decreto 70/2023 cuya aplicación quedó suspendida por la justicia laboral, que dictó medidas cautelares declarando su inconstitucionalidad y falta de necesidad y urgencia para eludir al Congreso.

Con la jura de ambas Cámaras, la conquista de la primera minoría en Diputados y el triunfo de octubre, el Gobierno está envalentonado y listo para avanzar a fondo con las reformas que exige Washington. Manuel Adorni confirmó el viernes por la tarde el temario de las sesiones extraordinarias: además del Presupuesto y la reforma laboral, incluirá el proyecto de “inocencia fiscal” para que los argentinos saquen los dólares “del colchón”, los cambios a la Ley de Glaciares y la reforma del Código Penal.

El decreto que Milei firmó al comienzo del fin de semana largo se publicará el martes próximo. Recién llegada al Congreso, Patricia Bullrich es una de las que más presiona para que la reforma laboral avance en paralelo con el Presupuesto 2026, que entiende, será aprobado sin mayores resistencias y traccionará al resto de las iniciativas. En las últimas horas, los senadores recibieron de manos de la exministra una copia de la reforma. El texto, de 109 páginas, que conserva el espíritu del proyecto presentado por la diputada libertaria Romina Diez en 2024 y que también llegó a manos de los dirigentes de la CGT y de la UIA. Sus dirigentes le bajaron el precio y sostienen que se trata de “un globo de ensayo para evaluar reacciones”.

Sin embargo Página/12 confirmó que la letra chica ya empezó a discutirse en la reunión de bloque del oficialismo del último jueves comandada por Bullrich.

Contra los monotributistas

El anteproyecto golpea de lleno a los trabajadores monotributistas. Si bien en los últimos dos años, por cada diez empleos asalariados que se perdieron, surgieron siete bajo la modalidad de monotributo, según los datos del Monitor de Empleo Formal del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf). Ese avance, que expone un mercado laboral cada vez más precario, no se atenúa con la reforma: se profundiza.

Un abogado laboralista explicó a este diario que el texto “invierte la presunción de laboralidad”. Hoy la ley presume que toda prestación de trabajo configura una relación laboral, aun cuando haya factura, monotributo o contratos de locación de servicios. La modificación propuesta rompe ese principio: si hay factura, no se presume un contrato de trabajo sino una locación de servicios. En la práctica, esto bloqueará cualquier reclamo por relación encubierta. El trabajador quedará fuera de la Ley de Contrato de Trabajo y sin acceso a derechos básicos.

Indemnizaciones y fondo de cese

El anteproyecto introduce un giro sorpresivo en el fondo de cese. Se sustituye el fondo de cese por un Fondo de asistencia laboral (FAL) con una contribución obligatoria de todos los empleadores del 3 por ciento de la masa salarial combinado con una reducción del 3 por ciento en las contribuciones a la seguridad social. El mecanismo implica que el Estado dejará de recibir recursos para el sistema previsional y los redirige a un fondo destinado a cubrir despidos privados, una suerte de fondo compensador que socializa el costo de las indemnizaciones. En otras palabras, el Estado pasará a financiar los despidos. El investigador del IEF-CTA Luis Campos lo definió con crudeza en X: “Fondo de cese obligatorio financiado 100% con recursos públicos. Sí, el Estado a cargo de pagar las indemnizaciones. Uno nunca pierde la capacidad de sorpresa.”

El anteproyecto redefine también el cálculo de las indemnizaciones a la baja. Excluye de la fórmula conceptos como el aguinaldo, las vacaciones y las propinas, lo que reduce el monto final a favor del empleador y restringe los intereses sobre el capital indemnizatorio.

Vacaciones, banco de horas y licencias

El proyecto flexibiliza las vacaciones. Así, la temporada de verano ya no será un derecho, sino un privilegio que podrá disfrutarse sólo una vez cada tres años. Abre la puerta a que dos de cada tres veranos el descanso quede corrido hacia octubre, marzo o incluso fragmentado en tramos mínimos de siete días, afectando la vida familiar, el calendario escolar y la propia finalidad reparadora de las vacaciones. Si el cronograma es impuesto por el empleador deberán informarse con 45 días de antelación.

El texto incorpora la novedad del banco de horas, que autoriza a compensar horas extras sin abonarlas, a través de acuerdos individuales. Así la extensión de la jornada deja de tener un costo para el empleador y pasa a encuadrarse en un sistema de “compensación” flexible que licúa el pago por trabajo extraordinario. En Argentina la jornada laboral de 8 horas se adoptó oficialmente el 26 de septiembre de 1929, mediante la sanción de la Ley 11.544, durante el gobierno de Hipólito Yrigoyen. El proyecto libertario atrasa un siglo.

La reforma laboral establece un mecanismo de revisión para los certificados médicos presentados por los trabajadores. Se exigirá certificado con firma digital. Se creará una Junta Médica en caso de discrepancia entre médicos

En cuanto a las negociaciones salariales, se descentraliza la negociación colectiva al permitirse negociaciones por empresa.

Restricción del derecho a huelga

Uno de los aspectos que promete abrir un nuevo frente de conflictividad es que se extienden a varias actividades los servicios esenciales para restringir el derecho a huelga incluida la educación. Referentes gremiales que hablaron con este diario aseguran que es la puerta para judicializar la reforma.

Trabajadores de plataformas y el lobby de Uber

Milei llegó al gobierno con un respaldo fuerte de sectores informales que no se sintieron interpelados por los discursos tradicionales dirigidos al trabajador registrado. Sin embargo, la reforma laboral consolida su desprotección. El proyecto incluye un capítulo específico para los trabajadores de plataformas que, lejos de ampliar derechos, los mantiene en el mismo limbo legal de hoy: cuentapropistas sin convenio, sin jornada regulada, sin indemnización y por fuera de la Ley de Contrato de Trabajo.

El texto crea un régimen particular que opera como una desregulación a la carta para las empresas del sector. Según reconstruyó este diario, firmas con fuerte capacidad de lobby en el país —como Uber— pidieron quedar por fuera de la nueva normativa general para evitar obligaciones laborales básicas. El gobierno aceptó el planteo y terminó de redactar un capítulo hecho a medida del negocio de las plataformas que representan el modelo de negocios actual de Internet en su fase más concentrada y monopólica.