jueves, 8 de diciembre de 2022

Nadie se presentó a un remate para compartir una propiedad de 87.046 m2 frente al Lago Argentino, que Porota había comprado al irrisorio valor de 1 peso el metro cuadrado

 

Nadie se presentó a un remate para compartir una propiedad con Máximo y Florencia Kirchner

Se trata del terreno que los Kirchner y los Báez tienen en condominio frente al Lago Argentino; es el mismo que la vicepresidenta compró en 2006 a un valor irrisorio, de poco más de 1 peso el metro cuadrado



EL CALAFATE.- Ningún postor se presentó en un remate para compartir una propiedad con el diputado nacional Máximo Kirchner y su hermana FlorenciaSe trata del terreno de 87.000 metros cuadrados ubicado en el Calafate que la familia Kirchner posee con Lázaro Báez, sobre los márgenes Lago Argentino. En el marco de la Quiebra de Austral Construcciones ayer se remató el 50% de la propiedad indivisa que los convirtió en condóminos, pero el remate quedó desierto.

No hubo ningún oferente para adquirir el 50% el terreno de 87.046 m2, desocupado y sin construcciones, ubicado en Punta Soberana, a 10 kilómetros del centro de la ciudad. La base para el remate se fijó en US$177.480, dentro de la quiebra judicial a cargo de la jueza María José Gigy Traynor.

La existencia del terreno, revelada a través de una investigación de LA NACION en el año 2013, fue la primera prueba documentada de los aceitados vínculos comerciales e inmobiliarios que los Kirchner mantuvieron con los Báez durante más de una década. Este año, durante las audiencias del juicio por Vialidad, los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola volvieron a dejar expuestos estos vínculos.


La vicepresidenta Cristina Kirchner adquirió el terreno –junto a varios más que compró al municipio junto a su esposo mientras él era presidente de la Nación–, como tierra fiscal en el año 2006 a un valor irrisorio de poco más de 1 peso el metro cuadrado: la zona entonces estaba alejada, no tenía servicios y el acceso era dificultoso.

Tiempo después, Cristina Kirchner necesitaba ampliar el hotel Los Sauces, y lo hizo sobre la Quinta 10, que era de Báez, para lo cual concretaron una permuta: ¿Qué le dio a Báez? La mitad del condominio de casi nueve hectáreas y el empresario lo registró a nombre de Austral Construcciones. Sin embargo, el bien no quedó registrado en sus declaraciones juradas, sino que quedó a nombre de Néstor Kirchner. Después del fallecimiento del expresidente, Cristina Kirchner declaró el 25% del terreno. Tiempo después, pasaría también su 25% a sus hijos Máximo y Florencia.

Las casi nueve hectáreas de patagonia pura se encuentran a diez kilómetros del centro de El Calafate, en Punta Soberana, que fue loteado como chacra. Para llegar hay que transitar por el paseo costanero que fue asfaltado por la empresa Austral Construcciones. Para llegar a la fracción “CCXXXIII” hay que transitar unos ocho kilómetros desde la intersección con la ruta 11, que va al glaciar, y bordear el lago. Tras 16 años de haber sido adquirido por Cristina Kirchner, el enorme predio con vista al lago Argentino sigue vacío.

Tampoco hubo postores para tres estancias de Báez

Además del terreno en común, también se llevó adelante el remate de tres estancias de Báez, todas registradas a nombre de Austral Construcciones: tampoco se presentó ningún interesado para la compra. Entre las propiedades se encontraba Cruz Aike, ubicada a 53 km de El Calafate, la joya del imperio que Báez construyó de forma veloz en torno a Austral Construcciones a partir de los abultados contratos de obra pública en Santa Cruz. La base para el remate se estableció en US$1.475.000. Nadie ofertó.


El día de la exhibición de la propiedad, LA NACION la recorrió y se encontró con habitaciones sin muebles, paredes inmaculadas, pisos sin tránsito y un sorprendente agujero en una pared, huella evidente de quienes alguna vez buscaron tesoros escondidos. La estancia también fue escenario de las excavaciones que llevó adelante el fiscal Guillermo Marijuan en la búsqueda de supuestos tesoros enterrados en containers, a unos kilómetros del casco principal. Los tesoros no se encontraron, pero hoy sí quedan vestigios de saqueos ocurridos en el predio durante los años que quedó clausurada y vacía.

También quedaron desiertos los remates de La Porteña, cuya base se estableció en US$550 mil; Laguna Asador, con una base de US$298.642. Fuentes judiciales confirmaron que luego del receso estival se volverá a repetir el llamado a remate.


En octubre pasado, en un primer corte de los fondos recaudados por los remates en la quiebra de Austral Construcciones se informó que se distribuirá entre los acreedores cerca de $2600 millones, en lo que será el primer pago desde que se inició el proceso de quiebra. De ese monto, cerca de $1500 millones estarían destinados a la Administración Federal de Ingresos Públicos, el principal acreedor del empresario, y eso será solo parte de la deuda con el Estado.

La quiebra que desde hace cuatro años se tramita en el Juzgado en lo Comercial Nº 28 con sede en Buenos Aires lleva más de un centenar de incidentes abiertos. Ya sea por la forma profusa en la que Baéz adquirió bienes a partir del 2006 o bien por la maraña judicial en la que quedaron atrapados sus activos, fue una tarea titánica, que aún tiene años por delante. (LN)

3 comentarios:

  1. https://mobile.twitter.com/viviamperroneOK/status/1600543717433171969?cxt=HHwWgoCz0f2Bo7YsAAAA

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  2. https://mobile.twitter.com/perritos_qctd/status/1600882842069659648

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