Sunless, nuestra querida amiga ventanera, nos escribe sobre el Gato Mauri

"Quiero a este flaco desgarbado que se sube al techo del colectivo y dice discursos pedorros. Quiero a este hombre que discursea mal porque es Ingeniero... según dice Lilita.

Quiero a este Presidente-gato que no entiende la "rosca política", porque él no es enroscado.

Quiero al hombre que el primer día que entró a la Casa Rosada, saludó a los granaderos y les hizo arreglar las pocilgas donde dormían y comían, transformándolo en un espacio lindo y habitable. Volvió a darles dignidad, luego de años de no poder mirar a los ojos a la Porota, ojos de víbora.
Volvió a tratar con respeto a quienes lo cuidaban y recibió respeto de ellos, ninguneados por años. 

Él también fue ninguneado, por cualquiera y casi todos los días y se la bancó, como lo que es: un Señor. 

Este Señor trata igual a Margarita Barrientos, a Lagarde, a Macron y al obrero que está haciendo un puente. 

Lleva un paquetito con facturas cuando toca timbre en la casa de alguien que lo invita.

Tiene una esposa estupenda que, dice, es una "negrita hechicera", y una "hijita bombón " llamada Antonia, con la que arma rompecabezas. 

A este Gato Presidente, no le dieron un día de paz desde hace casi 4 años, los "piolas rosqueros que saben de política" y no como él, que es un "nardo"... e Ingeniero. 

Lo denigraron, todos, los que quieran, desde el Papa demoníaco hasta alguien que dice que no hace falta ir al colegio, que eso lo hacen los giles con sus hijos "porque yo fui hasta tercer grado, dirijo el Sindicato más poderoso y hago caer un Presidente cuando quiero": véase Don Hugo Escoria Moyano. 

Pagada con nuestro dinero, lo insultó en continuado, Doña Hebe, las feminazis, la ejemplar Vicky Donda, Wampas, nuestros excepcionales actores y actrices, nuestros periodistas panquecoides y cualquier kakarulo al paso. Faltaba solo el insufrible "Zamba"... (ojo que si ganan... ¡vuelve!).   

Pero un día apareció Gonzalo (¡graciassss, Gonzalo!) y empezó a darse cuenta que había gente afuera de la rosca, el círculo rojo y otras porquerías, que lo querían. Y allá se fue nomás, a decir "gracias" sin micrófono, total aunque el discurso fuera medio flojo y desde luego, no comparable a las grandes piezas oratorias de Porota, la Jefa de la banda de chorros decididos a "resistir con aguante", a la gente le gustaba verlo, tocarlo, decirle aguante gato y gritarle que él, Mauricio, el Ingeniero, podía "darla vuelta". 

Como en el Teatro Colón, en el G20, los ojitos (de cielo... Je), volvieron a licuarse en agüita verdadera. A él también empezó a gustarle subirse al techo del bondi y que Juliana lo agarre del borde del saco en una inútil maniobra de protección a la más que posible caída y se dio cuenta que cada vez eran más los "mansos" que se juntaban y más los que se emocionaban junto con él, cuando los ojitos se empeñan en ponerse acuosos cuando le gritan "gato vos podés, juntos podemos". Entonces se da vuelta, medio con vergüenza y grita "¡los quiero con el alma!". Y, ¿sabés qué, Gato, Sr Presidente Don Mauricio Gato Macri?, nosotros te creemos. Queremos que sigas siendo así, el flaco fobalero que habla flojito, pero tira energía poderosa, que se traga el bigote de Freddy, que canta mal y baila peor, que parece no avivarse en que lo van a joder al día siguiente, pero hasta ahora el Club del helicóptero no te vio partir, siempre llegar.

¡Qué suerte, que siempre llegás, Mauri!, qué suerte que sepas decir "gracias", "perdón", "los amo"... Seguí llegando, que los mansos te recibimos... Los mansos que te queremos así, un poco "catrasca", un poco Ingeniero, un poco gato, un poco inocente. Un mucho resiliente. Un mucho hombre BUENO. Un mucho Señor Presidente. Quedate ahí. Nosotros con vos y con todo lo que dijo tan maravillosamente Bazán. 

Quédese con nosotros Sr.  Presidente Don Mauricio Macri. Que el helicóptero se lleve la runfla, la escoria paralizante, el miedo, "la brisita bolivariana", la Porota y su títere, su plata ensagrentada y su nefasto relato. Usted ahí, con los mansos... ¿Vio cuántos éramos Presi?

Por favor, déjenos también a Mariu Vidal, que sin ella y con el Kici la Provincia va a ser un sinvivir..."