Los lectores de La Ventana dicen...

Reflexión sobre el proyecto de ley interrupción voluntaria del

embarazo

Proyecto de ley “Interrupción voluntaria del embarazo”

Artículo 2: “... mujer o persona gestante...” no entiendo la diferencia que establece, una mujer no es persona? Además de la mujer que otro ser humano tiene la posibilidad de gestar?

Artículo 3: “... interrupción voluntaria...” sería finalización, cese, fin de la vida del feto o embrión.  “... hasta la semana 14...” en base a qué criterio se establece este “tope”?

Artículo 4: “Consentimiento informado” profesionales de la salud mental se han preguntado del impacto a nivel psicológico que implica esta acción en una mujer que realiza semejante elección? 

Artículo 5: “consentimiento informado” dado por una menor de edad, posible si, se imaginan la situación que lleva a esta adolescente a tomar esta decisión? Y además debe “responsabilizarse” en la medida que pueda hacerlo, por el resto de su vida de semejante decisión.

Artículo 8: “Consejería” será posible encontrar personas idóneas, si la elección realizada, el acto llevado a cabo se sostiene en el respeto a “los derechos humanos, a la vida, la autonomía, la integridad, la diversidad corporal, la intimidad, la igualdad real de oportunidades, la libertad de creencias y pensamientos” (como se detalla en el Artículo 1) para qué requiere consejería? A alguien que logra su cometido, que alcanza su meta, que cumple su propósito, por qué le haría falta consejería? Por qué se debe contener? 

Contradicción.

“...autonomía en la toma de decisiones...” profesionales de la salud mental, saben lo que esto implica, y saben que no es precisamente lo que se produce al momento de la elección o posterior a la misma. Entonces de qué autonomía están hablando?

Me siguen surgiendo demás preguntas como qué implica la libertad de elección?

A nivel de conciencia, que diferencia existe entre una decisión responsable o una decisión ajustada?

Qué papel juega la responsabilidad? Qué libertad posee una mujer que decide sobre vida y muerte? No importa de quien, sino específicamente sobre vida / muerte. Que son los conceptos que entran aquí en juego.

Que acompañamiento hace o no hace el estado? Es efectivo? Cómo lograr un acompañamiento lo menos posible contaminado de preconceptos, ideologías, creencias?

Hasta que punto un profesional de la salud realiza un apoyo incondicional a esa mujer que llega a la consulta?

Por otra parte, qué mensaje subyace a la acción de la interrupción voluntaria de un embarazo? Mejor dicho a la finalización de embarazo?

Qué mensaje subyace a la legalidad de la acción? Dejamos de criminalizar a la mujer que opta por esta acción, bien, pero es un acto que debamos felicitar? Que cumple con lo planteado en el artículo 1? Le confiere dignidad a la mujer? Autonomía y etc, etc, no!

Cómo se enlaza este proyecto de ley con los derechos del niño, con los derechos de Niño por nacer?

Qué mensaje transmitimos a las próximas generaciones?

Qué se considera una emergencia de salud pública?

Y así me siguen surgiendo muchas preguntas más, considero que hoy como sociedad no hemos avanzado lo suficiente como para asumir tremenda responsabilidad, tampoco estamos listos como estado para afrontar económica, administrativa, profesional y humanamente lo que implica esta ley.

Quizás en un tiempo posterior con mayor conocimiento, conciencia y mejores especificaciones podamos adecuar esta solicitud.

Lic. Psicología

Gabriela Alejandra Uño