domingo, 8 de abril de 2018

Es que un día le llega en moto y otro en bicicleta, de ahí las diferencias




7 comentarios:

  1. Hola Julia!
    Escribo estas palabras como una forma de desahogar el asco que tengo por la justicia y los políticos de Argentina.
    No encuentro otra palabra para denominarlos que esa, asco o repugnancia.
    Y ya no es una excusa que los latinos somos tercermundistas. Poprque ejemplos dan uruguay con un ex-presidente que continúa su vida en la modestia, o Perú con un presidente obligado a renunciar, o Chile con una ex-presidenta super cuestionada por el tráfico de influencias de su hijo o Brasil, con una Presidenta echada o un ex-presidente y candidato preso.
    Es un problema nuestro, de nuestra sociedad (aunque debo reconocer que bastante infiltrada por muchos "despojos" de esos otros lugares como los mencionados, que al ser echados de sus orígenes se disputan en nuestro territorio alcances del narcotráfico y todo tipo de delitos asociados, obviamente patrocinados por esa justicia y esos políticos a los que aludí al principio).
    En mi querida Patria la justicia, el fin último al que cualquier ciudadano o cualquier persona (pensando en el Juicio Final) es parcial, inoportuna y esquiva. Obvio, a un precio.
    Mientras que en Brasil encarcelan sin tapujos a un ex-Presidente nuevamente candidato por sus actos delictivos con casi la mitad del electorado a su favor, en nuestra Argentina no podemos ni tomarle declaración a la sinvergüenza de Hebe de Bonaffini, simplemente porque al mejor estilo Bonnie and Clyde se le antojó escaparse por las veredas de Buenos Aires.
    O no podemos poner tras las rejas a un ex-presidente como Menen que se ampara en sus fueros como Senador , siendo prácticamente un fantasma en el Congreso.
    O un corrupto archi millonario como Cristóbal López que sin ningún tipo de pudores desafía a la AFIP, siendo que a cualquier otro ciudadano le caen los considerandos de la Ley obligándolo a penalidades y multas en caso de desobedecer sus alcances.
    O, como, po supuesto el ejemplo más claro de la repudiada ex-presidentE Cristina de Kirchner que debería dar sus declaraciones judiciales y eventualmente cumplir una prisión preventiva, pero se nos caga de la risa en la cara mientras forra la cajita bnancaria de su hija y se apropia de nuestro Sur.
    Pero no importa.
    Ella y su séquito infame siguen libres pavoneándose ante la ciudadanía sin angustia. Total... quién le coloca el cascabel a ese gato si absolutamente totos, políticos y miembros de la justicia, están "aplacados" y también forrados en otras cajitas (muuuuuyyyyyy felices).
    Sólo siento asco. Un asco supremo.
    ¿Y sabés qué es lo peor? Qe también siento un gran dolor.
    Porque mi querida Argentina, en la me quedé aún en épocas oscuras y que no fui indemnizada por ello (siendo que más mérito creo tuvimos los que nos quedamos que los que escapamos) y a la que sigo apostando al enseñarles el mismo amor patrio a mis hijos, cada día me duele más.
    Ya no me contentan sus riquezas naturales, ni la diversidad de sus climas, ni la calidez de su gente ni la carga genética que nos dejaron nuestros abuelos laburadores, porque siento que otras personas nada merecedoras se apropiaron de todo ello, dejándonos en un vacío infranqueable.
    No existe la justicia, entonces estamos totalmente indefensos.

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    1. Lamento desilusionarte con lo del “ex-presidente que continúa su vida con modestia”, xq ese es un vende humo que nunca trabajó y si vivía con modestia debe ser xq metía la plata de su sueldo y el de su mujer ( senadora) abajo del colchón.
      Este barrio tercer mundo ata es malo, algunos mejores, otros peores, pero es un barrio malo.

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    2. Quise poner que en este barrio todos somos tercer mundo, algunos mejores, otros peores, pero es un barrio malo

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  2. https://www.youtube.com/watch?v=-lPP0QEhZlo

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  3. Con mucha tristeza coincido en todo con la anterior reflexión. Pobre mi Argentina.

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  4. 9:55 excelente reflexión.

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  5. No lloren sobre la leche derramada, dejen de quejarse que me tienen podrida, esos gobiernos y esa justicia las parió esta sociedad, no nos hagamos los inocentes, hay que hacerse cargo y dejar de echar la culpa fuera

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