"El lunes 31 de enero, un productor del programa radial de Nelson Castro recibió un llamado. Del otro lado de la línea estaba Alejandro Sánchez Kalbermatten, un abogado conocido por generar denuncias con las que intenta aparecer en los medios de comunicación. Esta vez, parecía más excitado que de costumbre. “Tengo a un testigo que sabe dónde está Julio Lopez – le dijo al productor– pero no sé qué pasos hay que seguir para que pueda cobrar la recompensa.” Se refería al millón y medio de pesos que el Estado prometió entregar al que aporte datos sobre el paradero de López, desaparecido desde el 18 de septiembre de 2006.
El productor radial conectó al abogado con funcionarios del Ministerio de Justicia de la provincia, y la noticia llegó hasta el ministro de Seguridad y Justicia Ricardo Casal. El acuerdo entre el abogado y los funcionarios fue que el testigo declarara ante ellos, y que luego desde el Ministerio presentarían el acta ante la Justicia. La cita para hacer el trámite quedó fijada para el martes 1 de febrero a las 13.30 horas.
Seis horas antes de ese encuentro, Sánchez Kalbermatten salió al aire en el programa radial de Nelson Castro, que ya estaba enterado de la existencia del testigo. Allí, el abogado se explayó hablando sobre las bondades de su estudio, asegurando que participaba en varios “casos emblemáticos” y que por eso se solían acercar a ellos “testigos en peligro”, a los que ellos evaluaban para luego presentar o no en la Justicia. En algún momento de la charla –cuando el abogado terminó de hacer una publicidad de su estudio– hablaron de Julio López y de un testigo que había llegado a él en busca de protección. Cuando la entrevista promediaba los seis minutos, Nelson Castro intentó hacer una síntesis:
–Entonces, la persona ya declaró en sede judicial y faltan los pasos para que el Ministerio de Justicia, o el juez, siga los pasos para verificar si lo que dice este señor es cierto.
–Efectivamente– contestó el abogado.
Pero lo que decía no era verdad.
Cuatro horas después de esa primera aparición mediática del abogado, Casal y el gobernador Daniel se sentaron frente a los periodistas acreditados en la Casa de Gobierno de la provincia. Scioli venía de firmar un convenio con el Banco Interamericano de Desarrollo por el manejo ambiental del Río Reconquista. La conferencia de prensa estaba pensada casi como una formalidad. Los dos funcionarios explicaron las bondades del primer mes del Operativo Sol, el plan de seguridad para la costa atlántica. Al final de sus discursos abrieron una ronda de preguntas. Pero los periodistas no querían saber sobre la inseguridad en la costa, sino sobre Julio López y el nuevo testigo. Scioli y Casal improvisaron: un poco nerviosos, respondieron generalidades y dieron por terminada la conferencia.
Casal era el que más traspiraba.
La rueda de la agenda mediática, en la que unos medios repiten y amplifican lo que ya dijeron otros, estaba en movimiento.
Recién una hora después de la conferencia de Scioli y Casal, el testigo declaró frente a los funcionarios. Aunque tampoco fue tan así. En realidad, su abogado entregó un escrito firmado por ambos en el que contaba lo que en teoría sabía sobre el paradero de Julio López. Allí decía que el albañil desaparecido estaba enterrado en la zona de Parque Pereyra Iraola, en los alrededores de la estación de trenes. Tanto en el Ministerio de Justicia como en la Fiscalía recibieron los datos con indignación. “La información era tan escueta como imprecisa –aseguró a Miradas al Sur una fuente judicial–. Tuvimos datos mucho más serios y precisos que este y no trascendieron a la opinión pública. Pero no podemos hacer nada: a todas las pistas hay que tratarlas como si fueran reales y chequearlas hasta el final. Y si la pista es real, el abogado arruinó todo: el que mató a Julio López ya debe estar saliendo del país.”
Pocas horas después de que el escrito llegara a manos de los funcionarios, la Policía Federal y la Policía de Seguridad Aeroportuaria cercaron al predio.
Los últimos en saber del nuevo procedimiento fueron los familiares de López: se enteraron por los medios de comunicación.
El jueves, con todos los medios trasmitiendo desde el lugar, uno de los abogados de la querella, Aníbal Hnatiuk, dialogó con Miradas al Sur. “Lo que vamos a pedir –dijo– es que el testigo declare frente a la Justicia para dar precisiones. Lo que dijo es algo genérico. Al principio de la causa pasaba todo el tiempo: hubo decenas de testimonios parecidos.”
Lo mismo pidió el fiscal del caso, Hernán Schapiro. El abogado Sánchez Kalbermatten –en esas horas convertido en una especie de estrella mediática– en principio dijo que el testigo declararía si estaban dadas las condiciones para hacerlo. Pero el mismo jueves anocheció con otra noticia: un llamado al 911 avisó que el testigo “sería asesinado en las próximas horas”.
Con ese dato, Sánchez Kalbermatten consideró que su protegido no tenía garantías para declarar, y no se presentó en tribunales.
Lo que hizo, en cambio, fue ir al programa de Mauro Viale en América 24. La entrevista se grabó en un living, con el testigo de espaldas y el conductor junto al abogado de frente a cámara. Pero si Sánchez Kalbermatten soñaba con emular a Samantha Farjat, la movida le salió mal. A la hora de televisar la nota, ya se sabía que la búsqueda en el Parque Pereyra Iraola había dado resultado negativo. El video mostró de espalda a un joven de pelo corto y camisa de vestir que sólo contestaba de forma precisa cuando se deshacía en elogios para su abogado patrocinante. También se pudo ver la desazón de Mauro Viale, el único que –hasta ahora– tuvo el privilegio de ver al supuesto testigo en persona. La entrevista se repetiría luego con el diario Perfil. Allí, el testigo dijo que “no se buscó donde yo dije”, algo que desde la Justicia desmienten.
En ambos medios, quién quedó en el centro de la escena fue abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten. Si antes era conocido por denunciar a Nestor Kirchner por la propagación de la Gripe A y por “hostigamiento contra el Grupo Clarín”, ahora podrá anotarse una nueva medalla mediática en su haber.
Para hacerlo, jugó con la esperanza de una familia que busca a su padre desaparecido. Y con la espectativa de todo un país que se pregunta, desde hace cuatro años, donde está Julio López." (Sur)

Yo no le compraría un auto usado a este sujeto.
ResponderEliminarEs mejor que la Justicia lo descarte y que se ocupe y preocupe de cosas importantes y no por las aportadas por este sujeto
ResponderEliminarQué ganas de hacer perder tiempo a la justicia.Hay cosas realmente importantes de que ocuparse.
ResponderEliminar¡Abogado cholulo desaparecé o andá a trabajar en serio!
que la justicia le inhabilite el título si para lo único que le sirve es para tratar de salir en tv.abogados así son repudiables,no son dignos.quiere que lo contrate rial como panelista de intrusos.
ResponderEliminarno puede tener mas cara de garca
ResponderEliminarqué pinta de mugriento! esos pelos,puajjj.
ResponderEliminarOtro abogaducho mediático y van...
ResponderEliminarY este carancho se atreve a denunciar ante el inadi??? Ppff q pais generoso!!
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