Un periodista muy creíble que honra la profesión...
Tres supuestos delincuentes se presentaron en su programa para contar cómo roban. A la salida, los esperaba la Policía. Eran extras contratados.
Chiche con los motochorros truchos.
Tres hombres que se presentaron en un programa de televisión como "motochorros", para contar supuestos delitos que habían cometido, fueron demorados a la salida por orden de autoridades de la Policía Federal.
El episodio sucedió en la noche del lunes, cerca de las 22 en la sede del canal C5N, situada en Fitz Roy 1940, tras el programa "Chiche en vivo", transmitido por esa señal y conducido por Chiche Gelblung.
Según fuentes policiales, a raíz de la presencia en ese programa de supuestos "motochorros", que contaron delitos que presuntamente habían cometido, como robo con armas, disparos de arma de fuego durante robos de autos y salideras, las autoridades policiales ordenaron al personal de la seccional 31 que acudiera al lugar y los demorara hasta dar intervención judicial del caso.
Una vez en la puerta del canal, los efectivos demoraron a las tres personas, quienes no llevaban documentos que permitieran identificarlos.
Según las fuentes policiales, productores del programa "Chiche en vivo" intentaron evitar que la policía se llevara a los hombres, al asegurar que se trataba de jóvenes contratados por 300 pesos para exponer a manera de "personajes" durante el programa.
Debido a que no tenían documentos, los tres hombres fueron llevados a la seccional, donde se dio conocimiento al juzgado de Instrucción 36, que dispuso que personal de la Superintendencia Comunicaciones de la Policía Federal observara la entrevista completa y que certifique la identidad de los tres supuestos "motochorros".
Los hombres aportaron en la seccional sus nombres y números de documento, dijeron estar los tres domiciliados en el partido de La Matanza y tener dos de ellos 20 años y el restante 23.
La policía aguardó a certificar sus identidades mediante huellas dactilares para poder dar conocimiento al juzgado, con el fin de que resuelva la situación. (24CON)
Excelente!
ResponderEliminarIncreíble...
ResponderEliminarQue locura que se ponga de moda entrevistar a motochorros o sicarios, que seguirá? se preguntarán los periodistas que consecuencias tiene su "informar todo"?
ResponderEliminarEn el caso de Chiche, doblemente censurable, porque "le dio ficción" a su público... y no creo que sea el único que recurre a esas tretas, pero de los pocos que quedaron tan en evidencia (aunque seguro le echa la culpa a la producción)
Coincido absolutamente con DANI
ResponderEliminareso solo es para tener mas rating
ResponderEliminarJa,ja,ja mori de risa.
ResponderEliminarLas nuevas estrellas de la tv. los motochorros. Alta tv!
ResponderEliminarLo tendría que haber llevado en cana al pelotudo de Chiche por trucho hijo de puta.
ResponderEliminaresto que le pasò a Chiche es lo que dijo Venturrito de los sicarios que entrevistò Lanata, dijo que eran productores del programa.(cosa que no creo para nada)
ResponderEliminarQuiero escucharlo al venturro, que acusó de hacer eso a Lanata,sin prueba o indicio alguno.
ResponderEliminarno lo vas a escuchar, Ventura solo se ocupa de Lanata.-
ResponderEliminarGelblung! qué ser tan asqueroso por favor, es repugnante!!!!!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarQue bien Chiche, con acciones burdas deja en claro que Lanata llevó lo mismo, actores diciendo toda la basura que quiere oír su público.
ResponderEliminarNo es para tanto, está basado en hechos reales jaja
ResponderEliminarComo nos venden buzones y nosotros lo compramos. Siempre me llamo la atención, que en otras entrevistas a asesinos no intervenía la policía, ahora entiendo. Lastima que Lanata estaba grabado sino nos daríamos cuenta que también son actores, no se puede entender que teniendo enfrente semejantes asesinos no de parte a la policía, y es en Rosario, no en Colombia.Si realmente son todos chorros y sicarios, no van a ser tan boludos de dejarse filmar aunque sea de espalda. Si realmente son actores, me imagino el cagszo de estos, cuando cayo la policía.
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