UNA FUERTE DENUNCIA DE PIPO CIPOLATTI CONTRA EL HOSPITAL CHURRUCA

Esta carta fue publicada en el blog de Pablo Layús y me acaban de decir que también habría sido leída en el programa radial de Lanata...

Voy a tratar de resumir.

Hace más de 5 meses mi mamá se cayó y se fracturó el cuello del fémur. Tiene 80 años.

Después de las primeras atenciones la trasladaron al Hospital CHURRUCA-VISCA (mi padre era policía) y comenzó la película de terror.

Yo no tengo experiencia en internaciones hospitalarias (jamás fui internado y mi madre tampoco) por lo que me encontré con un mundo desconocido y patético.

Operaron a mi mamá (Dr. Martínez) y le colocaron una prótesis. Al mes le dieron el alta. En el primer chequeo se dieron cuenta que tenía una infección. La internaron de nuevo y volvieron a operarla.

Al mes volvieron a darle el alta.

Nunca dejó de dolerle y jamás pudo mover la pierna.

Al poco tiempo la llevé para hacer otro chequeo y descubrieron que la prótesis se había salido de lugar. Volvió a quedar internada.

La historia es muy larga. Y no termina

En el Churruca no se están haciendo las cosas bien (no sé qué pasa en otros hospitales y no me interesa). Los médicos se contradicen (me refiero a los que ejercen en Traumatología), hay muchos residentes con actitud llamativamente soberbia y enfermeras que les importa más sacarse fotos conmigo que responder cuando pregunto algo acerca de mi vieja.

Eso es nada. Mi madre NO PUEDE NI SIQUIERA SENTARSE. Le quitaron la prótesis y hay que esperar dos meses para ver si se la colocan de nuevo. Tiene una pierna más corta que la otra.

Hace una semana y pico le dieron el alta nuevamente. El DR MARTÍNEZ (el que la operó por primera vez) me dijo que podía sentarse y que (a partir de una sugerencia mía) consiga una silla de ruedas convertible a camilla para que pueda estar en su casa y -de a poco- comenzar la rehabilitación (no entendí cómo, ya que le falta la prótesis).

Conseguí la silla en una ortopedia de Liniers, pagué 2 meses adelantados de alquiler y cuando llegué al Churruca para dejar el artefacto en su habitación con el objeto de que la acostumbraran a su “nuevo hogar”, un médico que estaba junto a ella en ese momento me dijo: -Al pedo trajiste eso! Si no puede sentarse! (todo delante de mi mamá).

Pedí la historia clínica y aún no me la dieron

Tengo que recurrir a los medios (en realidad, a amigos que trabajan en los medios y quizás puedan darme una mano) porque no se qué carajo hacer. Soy el único familiar directo y sólo cuento con la ayuda del papá de mi esposa, que no puede estar todo el tiempo encima del tema.

Cada vez que voy al Hospital, mientras me piden fotos o autógrafos, la gente me dice que el trato hospitalario es de terror. Se confunden de pacientes. Roban las pertenencias de los internados y mucho más.

Como corolario comento que, en una de las oportunidades en que llevaron a mi madre al quirófano, la dejaron casi una hora junto a 3 (tres) CADÁVERES antes de operarla. Yo creía que era un delirio de mi vieja (eso me lo había contado hace más de un mes). Ayer estuve con ella y cuando comentábamos -entre sonrisas- el tema, me dijo que los cuerpos de esas personas (los cadáveres) estaban rígidos y en el lugar había un cartel que decía “ÓBITOS”. Esa palabra no figura en el diccionario de mi mamá. La vieja tuvo la plausible actitud de decir: -Pensé que yo era la cuarta…

Gracias por leerlo. Mi mamá está sufriendo feo.

PIPO CIPOLATTI