Lanata, el inescrupuloso
Bajo el título “La Presidenta no soporta que la realidad no le haga caso”, el pavote periodista argentino Jorge Lanata escribió un artículo para el diario “Clarín”, se supone que gratis, en torno al intercambio de preguntas y respuestas entre la presidenta argentina y los hijos de los ricachones apoltronados en Harvard.
Nadie sabe muy bien cuál es el pensamiento real de este escriba pero a todas luces hace acordar al mercenario peruano (salvando las distancias, claro está) de Mario Vargas Llosa, siempre al servicio del neoliberalismo, según denunció desde un principio el inmaculado Le Monde.
Lanata quiso ser actor y fue un fracaso. Lo que hace muy bien es hacerse pasar por periodista. Con ello está logrando convocar buenas audiencias. Debajo de esa faz bonachona hay un demonio, por cierto.
Como dijo Richelieu: “El fin justifica los medios”.
Este sábado lanzó sapos y culebras contra su presidenta y el Grupo Clarín aplaude parado. El tipo es un bárbaro, realmente, quien le crea perdido está.
En su artículo omite muchas cosas. Los columnistas con experiencia saben hacerlo y nadie mejor que él. Cuando habla de los dichos de la presidenta sobre la Universidad de la Matanza no dice toda la verdad, basta solo con escuchar y leer con cuidado lo que ella dijo.
Por otro lado, que este periodista diga muy suelto de cuerpo que los estudiantes solo hicieron algunas preguntas ingenuas resulta todo un atropello a la inteligencia.
Vamos, Lanata, que usted sabe muy bien que estos chicos de Harvard fueron con las interrogantes escritas por su padres desesperados por no poder movilizar sus millones de dólares con tanta facilidad como antes.
Lo suyo es sencillamente grotesco y golpea la deontología del periodismo, pero como “Causa Abierta” entiende de códigos ahí va, íntegro, su pernicioso artículo:
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