"Pamela, con quien jugábamos a ser hermanas no apareció en este momento. La nuestra era una relación comercial para triunfar. Éramos dos promotoras solamente". Tras esa confesión Johanna reveló su verdadero apellido, que es Villafañe, y quiere que ahora se la empiece a conocer de esa manera.
"Todo empezó en Mendoza, cuando las dos dijimos que teníamos muchas ganas de venir a Buenos Aires a triunfar. Entonces nos propusimos pasar como hermanas y fue un secreto que sólo sabíamos las dos". Así fue como lo hablaron con sus verdaderas familias y decidieron emprender esta "mentira comercial".
"Yo quería llegar y no me importaba nada. Estaba bueno el morbo de las hermanas y lo aprovechamos".
¿Y Pamela? Habrá que esperar a escuchar la versión de la ex hermana Pombo.
Mirá el video
Video: laventanaindiscretadejuli /TeleShow
Estaría bueno que los conductores de los distintos programas dejaran hablar a sus invitados sin interrumpirlos luego de realizadas las preguntas... ¡¡Son imbancables cuando eso sucede!! ¿Será el efecto Mirtha?
Fuentes: TeleShow/SitioAndino

como estarán las cosas que la noticia es que no son hermanas, y no que perdió a un hermano
ResponderEliminarPor lo que veo se caga en la muerte del hermanito.
ResponderEliminarTenés razón, Julia, y la mayoría de los conductores o periodistas hace lo mismo, cuando uno quiere escuchar el final de la respuesta, le hacen la siguiente pregunta. ¡¡Todos se contagiaron!!
ResponderEliminarPorque ninguno de los conductores escucha a los entrevistados, porque quieren ser ellos los protagonistas, entonces no los dejan terminar para lucirse con la nueva pregunta que le van a hacer. Así nunca entienden nada ni dejan que los espectadores tengamos claro que es lo que dicen.
ResponderEliminarDe este mal, sufren Canosa y su troupe, Del Moro y secuaces y el panel de Intrusos, salvo Cora y Rial , que si no fuera por su temperamento, sería un muy buen entrevistador, deja hablar, escucha, y trata de indagar sobre puntos que no quedaron claros, siempre y cuando no esté empecinado por algún motivo particular en degradar al entrevistado.