Jorge Rial habló en Paparazzi sobre su separación

“Para el medio, cualquier mina que salga conmigo va a ser un gato”. 

● El conductor de Intrusos habla por primera vez de su nueva vida como hombre soltero 
● Su separación de Silvia D´Auro tras 21 años de casados 
● El desgaste profesional que le generó la crisis con su pareja 
● Sus ganas de volver a estar con alguien 
● Y habla de la Niña Loly, a quien señalan como su flamante conquista. 

Reflexivo: Jorge se separó en el mes que cumplió 50 años: octubre de 2011. Hoy vive en un departamento de Belgrano, y mientras hace radio y tele, prepara un libro periodístico.  

Su crisis personal y profesional. El final a un matrimonio de 21 años. Su nueva vida como hombre soltero. Los rumores que lo vinculan con una modelo. Lo que piensa y lo que siente. En algún momento, Jorge Rial (50) tenía que salir hablar. Y como corresponde en estos casos, cuando uno necesita abrir su corazón, lo hace con alguien íntimo, un familiar, un amigo. O lo que es igual, estas páginas de Paparazzi. En octubre se separó de Silvia D´Auro, la madre de sus dos hijas, Morena y Rocío. Y por estos días se lo vincula con Mariana Antoniale, más conocida como la Niña Loly. A fines del año pasado, Jorge dejó su casa de Tigre, y vive en un departamento de Belgrano.
–¿Cuánto hace que no te sentías soltero?
–Desde el noventa y pico. Pero finalmente me acostumbré… Le tenía mucho miedo a la soledad. Yo no tengo familia, entonces le tenía miedo a eso. Pero mis hijas fueron muy rápidas, se apropiaron de todo, me acompañaron, están al lado mío. Mi casa es su casa, cada una tiene su cuarto.
–¿Ese miedo demoró la decisión de separarse?
–No sabría decirlo. Yo no tenía ganas de separarme, lógico. No lo tomo como un fracaso. Se terminó una relación con la mujer que creí que iba a ser la mujer de toda mi vida, y que va a ser la madre de mis hijas toda la vida. Una mujer que es una gran madre, y que fue una gran compañera. Pero bueno, algo pasó, se fue desgastando y se terminó. Hicimos todo lo posible por salvar la pareja, pero no se dio.
–¿Qué hicieron por salvarla?
–Todo lo que se hace en estos casos: terapia de pareja, irnos de viaje solos, charlar, putearnos, gritarnos, reconciliarnos… No nos resultó nada, y lo lamento mucho de verdad. Lo estoy tratando de sobrellevar como puedo y, la verdad, estoy mejor de lo que esperaba.

Leé la nota completa en la revista Paparazzi de esta semana.