¿Se deschavó?
Finalizando su discurso en la embajada de París, la Presidenta -quien ha sido fuertemente cuestionada por emplear la estrategia del luto y la sensibilidad- aseguró que "queda bien llorar". Luego notó el fallido y se corrigió: "hace bien llorar". No hizo referencia a la tragedia de Flores.