¡Se erizó!!

¡¡Cómo loooocaaa se puso!!

Estaba haciendo un trámite en una oficina donde los empleados miraban un programa chimentero de la tarde. ¡No podía creer la furia de la conductora carmesí!! ¡Y el vocabulario parecía el de un camionero en un día de furia!! Y todo porque el bobalicón de Matías Alé el día anterior la había plantado en un móvil.

Ante un Matías al que no dejaba hablar y al que más tarde le cortó sin dejarlo decir ni mu, la locutora le reprochaba que no se hubiera presentado, cuando ella tenía pautada una hora... sí... ¡¡una hora, o sea 60 minutos para entrevistarlo!! de las 5 a las 6 de la tarde y debido a eso tuvieron que rearmar el programa ¡Qué difícil le habrá resultado encontrar reemplazo a semejante artissssstaaaa!!!

Entre muchas cosas le decía que no tenía códigos, que ella a las tres de la mañana y levantándose a las 5, había hecho el sacrificio de cocinar para alimentarle al perro porque se había enterado que el animalito no había comido ¡No puedo creerlo! La carmesí cocinando para el perro de Alé jajajaja!!

Un lío bárbaro se armó. Incluso destapó que le había prestado plata y no sé cuántas cosas más. Por supuesto no faltó la alusión habitual al programa de la competencia de manera elíptica, pero para nada sutil.

Una mujer con códigos... ¿Ventila todo eso al aire por un enojo?