Todos los funcionarios del actual gobierno -ante algún escándalo con repercusión penal- deberían tomar licencia como lo hizo Gómez Centurión, que pudo retornar a su función porque la Justicia no comprobó las denuncias en su contra. Creo que si Díaz Gilligan presentó su renuncia con carácter de INDECLINABLE es por su toma de conciencia sobre un error cometido que le puede costar un alto precio a Cambiemos en términos de imagen positiva. Por tanto hay que valorar esta actitud. Tomando como ejemplos ambos casos, así tendrían que "resguardar las espaldas" del Presidente aquellos que están en su entorno gubernammental. El Frente Cambiemos demasiado tiene que luchar diariamente contra las falsas injurias de la oposición argenta que tiene como objetivo derribar la imagen positiva de Macri, Vidal, Carrió y otros "peligros electorales del 2019" en un sector de la sociedad tristemente manipulable pero que va a sufragar en ese año. Y agrego que, en este sentido, no me gustó la auto-defensa de Triacca al decir livianamente que él presentó su renuncia pero que MM no se la aceptó; seguro que solamente se 'puso a disposición'. Cuando la figura de un funcionario se ve afectada por denuncias comprobables y pasibles de sanciones ya sean judiciales o éticas, mejor es dar un paso al costado.
Todos los funcionarios del actual gobierno -ante algún escándalo con repercusión penal- deberían tomar licencia como lo hizo Gómez Centurión, que pudo retornar a su función porque la Justicia no comprobó las denuncias en su contra.
ResponderEliminarCreo que si Díaz Gilligan presentó su renuncia con carácter de INDECLINABLE es por su toma de conciencia sobre un error cometido que le puede costar un alto precio a Cambiemos en términos de imagen positiva. Por tanto hay que valorar esta actitud.
Tomando como ejemplos ambos casos, así tendrían que "resguardar las espaldas" del Presidente aquellos que están en su entorno gubernammental.
El Frente Cambiemos demasiado tiene que luchar diariamente contra las falsas injurias de la oposición argenta que tiene como objetivo derribar la imagen positiva de Macri, Vidal, Carrió y otros "peligros electorales del 2019" en un sector de la sociedad tristemente manipulable pero que va a sufragar en ese año.
Y agrego que, en este sentido, no me gustó la auto-defensa de Triacca al decir livianamente que él presentó su renuncia pero que MM no se la aceptó; seguro que solamente se 'puso a disposición'.
Cuando la figura de un funcionario se ve afectada por denuncias comprobables y pasibles de sanciones ya sean judiciales o éticas, mejor es dar un paso al costado.
Totalmente de acuerdo
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